La prostitución siempre ha sido un empleo muy especial, marginado por la mayoría de la sociedad, pero último resquicio de muchas personas, especialmente mujeres, para poder sobrevivir. Lo curioso de este negocio es que se extiende por todo el mundo, de los países ricos a los más pobres, de las ciudades más grandes a los pueblos más pequeños. Allí donde hay demanda, hay oferta, y parece que en cualquier rincón del planeta hay hombres dispuestos a pagar por tener sexo con una mujer. Si bien hay muchas chicas que, por desgracia, son obligadas por proxenetas a entregar su cuerpo de esta manera, siendo esclavizadas incluso, muchas otras lo hacen por voluntad propia. Entendemos que la mayoría no tiene esta vocación de ser escort profesional, pero o no encuentran otro trabajo, o prefieren llevar a cabo este, algo menos duro y esclavo que muchos otros empleos, además peor pagados.
Y es que una escort puede ganar mucho dinero trabajando por libre, e incluso cuando alquila habitaciones en un burdel o prostíbulo, donde parte de sus ganancias van para el local. Dependerá, por supuesto, del tipo de servicios que realiza, y de la cantidad de los mismos. Sin embargo, sabiendo que las tarifas de las escorts suelen ser de al menos 30 euros por cualquier servicio, no cuesta demasiado hacer cuentas para entender lo que pueden llegar a ganar al día. En muchos casos, además, esta actividad es alegal, y está al margen de cualquier tipo de impuestos, por lo que las ganancias son íntegras para las chicas, siempre que trabajen por su cuenta, como ya hemos dicho. Podríamos considerarlas, de hecho, como trabajadoras autónomas en estos casos, aunque también hay muchas prostitutas que tienen horarios fijos. Las escorts aben cuantos servicios deben realizar para poder ganar el dinero que necesitan ese mes. Cuantos más servicios realicen, más ganancias obtendrán, por supuesto. Y esto también nos lleva a la pregunta: ¿cuántos clientes suele atender una prostituta al día?
La profesión del sexo
Denostada y marginada desde hace siglos, la profesión del sexo siempre se ha visto a través del cristal de la moral impuesta por la sociedad religiosa de turno. El sexo es algo íntimo y está mal compartirlo con los demás de cualquier manera, cuanto más sacar beneficio de ello. Sin embargo, puede ser visto como un trabajo cualquiera, en el que una persona ofrece unos servicios determinados a otras. Estos son muy íntimos, sí, y conllevan un encuentro muy especial, pero si lo reducimos a los propios servicios, una prostituta no se diferencia demasiado de una masajista, una camarera o cualquier otra persona que ofrezca un servicio determinado a sus clientes.
Hoy por hoy, muchas mujeres han abierto su mente en el terreno sexual y están dispuestas a entregarse en este tipo de placeres, sin ningún tipo de vergüenza ni remordimiento. Esto provoca que cada vez sean más las escorts que, por voluntad propia, se inician en esta industria. Internet ha facilitado mucho las cosas para poder hacerlo totalmente por su cuenta, sin depender de intermediarios, y así ganar más dinero y tener total control sobre lo que hacen. Por eso se anuncian en webs de contactos, con fotos y datos en sus perfiles, y un teléfono para que los clientes interesados las llamen. Se citan con ellos y les ofrecen los servicios sexuales que ellos desean, a cambio de una tarifa pactada. Tan sencillo como eso, pero también tan polémico.
¿Cuántos clientes atienden por día?
Cuando hablamos de este tipo de cosas debemos hacerlo siempre generalizando, lo cual ya supone un sesgo importante sobre la información. Dependerá muchísimo de la propia chica, de sus tarifas, de sus horarios y del dinero que quiera ganar. También dependerá, por supuesto, del lugar donde trabaje, incluso de la época del año. Una prostituta que trabaja en el centro de Madrid, en la calle, puede tener más clientela que una que lo hace en un prostíbulo de Mallorca, aunque en verano las tornas pueden cambiar. Por regla general, las escorts que trabajan por libre pueden atender a unos cinco clientes al día de medía, que no son demasiado en realidad. A veces atienden a muchos más, y otras veces tienen incluso días libres. Las que trabajan en prostíbulos y burdeles pueden llegar a doblar ese número, y atender de 8 a 10 personas al día, ya que ellas no se quedan con todo el dinero que ganan.
No hablamos siempre de las mismas cifras
La edad es otra circunstancia importante para determinar cuántos clientes se atienden al día. Hay chicas jóvenes que pueden estar con 15 hombres en un mismo día, tanto si trabajan en burdeles como si lo hacen en la calle. Suelen ser servicios más cortos, de media hora como mucho, para poder atender a todos en un horario realista. Conforme van haciéndose más mayores, esto suele ir disminuyendo hasta cifras más cercanas a las que hemos puesto arriba. Una escort con experiencia, que trabaje por su cuenta, puede atender entre tres y seis citas al día, siempre que no sean servicios demasiado largos. La demanda también es diferente, y por más que las escorts quieren trabajar, si los clientes no las llaman tampoco tienen muchas alternativas.
Entonces ¿cuánto dinero puede ganar una escort al día?
Esta es otra pregunta clave dentro del negocio, y como ya hemos visto con la anterior, es muy compleja de responder. Cada escort tiene sus propias tarifas, que elige ella misma si va por su cuenta, o que vienen impuestas por el sitio en el que trabaja. De media, cualquier servicio, por mínimo que sea, estará entre los 20 y 30 euros. Una media hora con una escort con experiencia puede llegar a los 50 euros, aunque hay chicas con mucho más caché, de 200 o incluso 300 euros la hora. Por eso es tan difícil dar una cifra exacta de lo que una escort puede ganar al día, sabiendo además que nunca será lo mismo. Habrá chicas que un día ganen 500 euros gracias a sus servicios, y en otros apenas lleguen a 200, porque la demanda también fluctúa.
Por norma general, podemos afirmar que cualquier escort puede ganar un mínimo de 100 euros al día, llegando a doblar fácilmente esa cantidad en días donde haya bastante demanda. Hay chicas que solo necesitan estar con un cliente para ganar eso, y algunas requieren dos o tres citas para conseguirlo. Las mujeres que trabajan para prostíbulos suelen llevarse solo una parte de ese dinero, ya sea la mitad o un 70%. Por eso suelen hacer más servicios, para poder ganar el mismo dinero. Ellas tienen ese hándicap, pero la ventaja de disponer de un sitio al que los clientes ya acuden con intención de disfrutar del placer. No tienen que buscar la clientela, les llega sola. Según estos datos, podríamos afirmar que cualquier escort en un país como el nuestro puede ganar unos 3.000 euros al mes, aunque por supuesto, de aquí habría que descontar gastos, que no son pocos.
