Estamos en el 11 de Septiembre del año 2001. Un día más, el World Trade Center se alza con majestuosidad sobre la ciudad de Nueva York. Miles de personas se encuentran en su interior ajenas al hecho de que sus vidas y las de sus familiares van a sufrir un duro revés de un momento a otro. De pronto, un avión comercial secuestrado por miembros del grupo terrorista Al Qaeda se estrella contra uno de los dos rascacielos. Así comenzó el que sería uno de los sucesos más impactantes de la historia: el atentado a las Torres Gemelas.
Casi veinte años después de que la tragedia tuviera lugar, este desgarrador suceso sigue en boca de muchos, y no es para menos. El atentado a las Torres Gemelas ha sido motivo de sospecha para los amantes del misterio y de las conspiraciones que continuamente teorizan sobre lo que realmente significó y supuso este famoso suceso. De entre la infinidad de teorías que envuelven el atentado, me gustaría hablar de algunas de ellas que a día de hoy siguen siendo un auténtico misterio.
Operación de falsa bandera
¿Por qué iba Estados Unidos a provocar un atentado en su propia ciudad llevándose por delante la vida de más de 3000 personas? Pues según muchos expertos en el terreno de la conspiración este hecho serviría como excusa para declarar la guerra a Irak por parte de Estados Unidos.
En principio esto podría sonar totalmente inverosímil. Pero si nos remontamos a otros muchos eventos históricos como el incidente de la Bahía de Tonkín en 1964 o el de Mainila en 1936 nos daremos cuenta de que no sería la primera vez que un país lleva a cabo estos actos de falsa bandera para contar con el apoyo de toda una nación enfurecida a la hora de declarar la guerra a otro país. Y precisamente esto es lo que afirman muchos conspiranoicos, que el derrumbe de las Torres Gemelas fue una demolición controlada y orquestada por el gobierno de los Estados Unidos para recibir el apoyo de sus ciudadanos en una guerra contra Irak.
¿Qué ocurrió con las cajas negras?
Otro de los temas favoritos de los amantes de la conspiración es el de las cajas negras de los aviones que atentaron contra Estados Unidos ese 11 de Septiembre, y no es para menos. Al parecer, de los cuatro aviones que formaron parte del fatal incidente solamente se encontraron las cajas negras de dos de ellos. Sin embargo, el estado de la mitad de estas cajas impedía recuperar archivo alguno que aclarase lo ocurrido durante el incidente y, casi del mismo modo, las únicas que quedaban y que podían arrojar algo de luz sobre el suceso pasaron por diferentes manos que contradicen sus versiones entre sí.
Respecto a las cajas negras de los vuelos que se estrellaron contra las Torres Gemelas, aunque la versión oficial dice que jamás se encontraron un bombero afirma que las descubrió entre los escombros y se las entregó a una persona que, no mucho después, desapareció por completo.
Hay muchos más misterios sin resolver que hacen referencia a las cajas negras de los aviones. Si quieres saber más sobre este tema te recomiendo echar un vistazo a este enlace.
Demoliciones controladas
Volviendo a la teoría de la operación de falsa bandera, muchos expertos coinciden en que el modo en el que ambas torres fueron derrumbadas se asemeja más a una demolición programada que al causado por el impacto de los aviones. De este modo, alguien habría colocado previamente diferentes cargas de explosivos en el World Trade Center de forma estratégica para, aprovechando el impacto causado por los aviones, detonarlas y provocar el derrumbe de los rascacielos.
El misterio del número 11
Todo lo que envuelve al conocido misterio del número 11 es, cuanto menos, curioso. Las coincidencias que tienen lugar alrededor de este número podrían ser casi inabarcables ya que, entre más coincidencias buscamos, más encontraremos.
El atentado ocurrió el 11/9. En marzo y mayo ese mismo año tuvieron lugar dos fuertes terremotos y el tsunami de Japón, ambos sucedieron el día 11. 911 días más tarde del suceso de Las Torres Gemelas (concretamente el 11 de marzo del 2004) tuvo lugar el atentado terrorista en el metro de Atocha. Además, si seguimos rizando el rizo podemos darnos cuenta de que el nombre de muchos de los presidentes de Estados Unidos contienen 11 letras: Bill Clinton, George W. Bush, Barack Obama e incluso Donald Trump.
En relación a este número también podemos encontrar incluso teorías proféticas. Algunas de ellas afirman que si descomponemos el símbolo del dólar americano podemos ser testigos de que tendríamos ante nosotros el número 11 y la letra S.
Aunque muchas de estas afirmaciones están cogidas con pinzas no deja de ser cuanto menos anecdótico todo lo que tiene relación con este número.
